Si bien aún se registra un aumento de la matrícula en septiembre y octubre, son cada vez más quienes mantienen el entrenamiento los doce meses. La batalla parece darse frente a la desinformación de las redes sociales.
Por Malena Alpern
Cada primavera, con la llegada de los días cálidos y el verano a la vuelta de la esquina, muchos marplatenses retoman la actividad física para alcanzar el cuerpo que desean. Por eso, los gimnasios suelen considerar a septiembre y octubre como su “temporada alta”.
Esa urgencia puede marcar el inicio de un cambio de hábitos saludable, aunque en otros casos se trata solo de un impulso que se desvanece una vez llegado el verano, cuando vuelve a caer el número de socios. Sin embargo, en los últimos años se observa un nuevo paradigma: la gente empieza a reconocer la importancia de hacer actividad física todo el año.
Los profesionales coinciden en que el entrenamiento debe realizarse de manera consciente, con la información adecuada y acompañado de un plan alimentario que se ajuste a las necesidades de cada persona.
Matías Guerra, profesor de educación física y entrenador en War Training, observó que “en los dos últimos años la gente ha tomado un poco más de consciencia con respecto al entrenamiento. Veo que vienen un poquito más por salud, bienestar e incluso por recomendación del médico”.
Por su parte, Santiago De Llanes, profesor de educación física y entrenador en City Hall, señaló que “hoy en día hay mucho más conocimiento y conciencia, por un mayor acceso a la información gracias a las redes sociales. El único problema es que, como hay tanta información, también hay mucha desinformación. Llega gente con ideas irreales”.
Ejemplificó que “hoy está de moda el ayuno intermitente, pero la verdad es que no se adapta a cualquiera. Todo el mundo dice que quiere hacerlo o que lo está implementando, y cuando les preguntás de dónde sacaron esa información, te responden: redes sociales. Así pasa que a veces llegan con datos erróneos, queriendo aplicarlo sin cumplir las condiciones necesarias”.
En comunicación con el diario LA CAPITAL, el licenciado en psicología Rodrigo Josserme reflexionó sobre las motivaciones a comenzar una actividad física, dentro de las cuales se pueden encontrar las recomendaciones médicas, la influencia de nuestro entorno cercano, y, como exponente más significativo, los medios de comunicación, incluyendo las redes sociales y los mensajes de influencers.
Sobre esta última, explicó que “estamos en un contexto donde se difunden muchas cuestiones que tienen que ver con estereotipar ciertos modelos de cuerpos, que a veces son irreales y muy difíciles de alcanzar, que generan mucho malestar anímico y que a veces llevan a trastornos de la conducta alimentaria, que son sumamente complejos”.
En este marco, ir al gimnasio deja de ser algo positivo, convirtiéndose “en una obligación para tener este modelo de cuerpo que me dicen que es el aceptado”. De esta forma, “la motivación es alimentada por la meta de acercarme a toda una serie de estereotipos y prejuicios respecto a lo que debería ser”.
Santiago, el entrenador en City Hall, agregó que siempre explican que el entrenamiento debe estar “acompañado de una buena alimentación”, ya que “no alcanza solamente con venir al gimnasio”. Aclaró además que “el concepto de buena alimentación no es dieta estricta, sino cumplir con los requisitos que cada uno necesita”.
Si bien durante la primavera se sigue notando un aumento en la concurrencia a los gimnasios para “llegar bien al verano”, “por suerte, la gente está tomando conciencia de que la actividad física es para los 365 días del año, que hay que mantenerlo en el tiempo”, expresó Francisco “Pancho” Mutti, de la cadena de gimnasios Sport Club.
La idea de empezar en estos meses para alcanzar un ideal físico para el verano, explicó Mutti, es “medio fantasiosa”, ya que “en unos meses no se logran grandes cambios”.
“Por suerte, ese pensamiento va quedando atrás y la gente va tomando más conciencia, seguramente por la cantidad de información que hay en las redes. Hoy hay mucha información muy interesante, aunque también mucho chamuyo, habladurías que no tienen fundamento”, concluyó.
La construcción de los hábitos
Para transformar una conducta en un hábito hay que basarse en la constancia y la disciplina, en “sostener la práctica incluso cuando no se tiene ganas”, y en encontrarle un sentido personal a la actividad, explicó el licenciado Josserme.
A su vez, es “sumamente importante pensar en términos de estilo de vida. Corrernos de esta idea de ir al gimnasio para tener ese cuerpo estereotipado que aparece en las redes sociales, medios de comunicación y películas, y empezar a pensar en la construcción de un hábito que esté centrado en el bienestar y la salud”.
Esta importancia se debe a que la construcción de los hábitos se ve atravesada por esos factores socioculturales negativos “muy propios de la sociedad occidental de la cual nosotros formamos parte”, y es necesario que ellos no se transformen en el motor principal.
“Es decir, no vamos a construir un hábito en un vacío; el hábito es una conducta que se hace en un marco social determinado y va a estar atravesado por toda esta serie de estereotipos y prejuicios, que a veces operan como mandatos sociales”, sentenció.
El rol de las redes sociales
Las redes sociales tienen una gran influencia en nuestras prácticas, y el licenciado se detuvo en las formas negativas: “a veces sobreabunda tanta información que sentimos que estamos desbordados. Muchas veces nos obstaculizan en vez de ayudarnos”.
A su vez advirtió que “siempre hay que chequear las fuentes y ver que lo que dicen este validado científicamente, y si esta persona es un profesional o si es una persona que tiene un montón de likes y seguidores y desde ese lugar puede decir o difundir cualquier cosa porque tiene un auspiciante o una marca que le brinda un canje”.
En este contexto, donde se absorbe mucha información difundida en redes sociales, “es sumamente importante formar a los jóvenes de las nuevas generaciones, para que no se queden con lo que, simplemente, les está diciendo otra persona porque tiene x cantidad de seguidores o porque sus posteos se viralizan rápidamente”.